Ejercicios Ataque de pánico

Ejercicios mentales para combatir el pánico

1) Hemos descartado enfermedades

2) Ya sabemos que es ansiedad o estrés

Ahora que sabemos que los síntomas físicos que tanto malestar y miedo nos han producido son por ansiedad o estrés, es el momento de iniciar y entrenarse en ejercicios eficaces y sencillos para localizar y combatir los miedos que producen los ataques de pánico.

  1. Ejercicios mentales para localizar y combatir el pánico

Con estos ejercicios conseguimos deshacer el nudo mental que provocan las preocupaciones y los miedos, y que causan tensión y ansiedad.

Vamos a recordar que la primera crisis de ansiedad y ataque de pánico son desencadenados por  preocupaciones o miedos que producen estrés mental y pensamientos ansiosos. Pensamientos relacionados con las preocupaciones y miedos personales, que terminan desencadenando emociones de angustia y sentimientos de frustración, miedo, impotencia, sensación de estar en peligro, e incapacidad para resolver esos problemas importantes que nos van envolviendo y presionando y no encontramos la salida.

Esta situación mental, creada por preocupaciones, produce una tensión intensa que acaba estallando en una tormenta corporal de sensaciones físicas.

Recuerde que el cuerpo estalla para descargar la tensión acumulada por estrés, o por preocupaciones insoportables que producen un miedo aterrador.

Y a la vez esta descarga corporal intensa de tensión acumulada, se manifiesta con reacciones físicas muy desagradables: el corazón a cien, mareos, no poder respirar, pinchazos en el pecho…, que producen más miedo, angustia y pánico a que ocurra algo horrible en ese momento como es un ataque cerebral, asfixiarse y morir.

Pero si ya ha tenido un ataque de pánico y realizado una revisión médica, y le han dicho que todo está bien, está claro que es ansiedad: una tensión mental muy intensa que no ha podido manejar y que finalmente estalla desencadenando reacciones físicas muy desagradables y agobiantes.

La tensión generada por el estrés y las preocupaciones y miedos personales, puede ir acumulándose sino le damos salida, hasta llegar a explotar. Y eso es, en definitiva, un ataque de pánico: una carga emocional excesiva que se ha ido acumulando o una carga excesiva emocional de un solo golpe, que supera la tensión que puede soportar el organismo y descarga mediante reacciones físicas intensas, que van soltando tensión hasta que el sistema nervioso puede volver a funcionar de forma normal, sin esa carga excesiva de sustancias como la adrenalina, cortisol y otras sustancias, que el estrés y la ansiedad hacen que el cerebro libere más de la necesaria y vaya a la sangre, provocando finalmente reacciones fisiológicas

Una vez el cuerpo ha estallado, se va calmando, y desaparece el ataque de pánico. Se puede calmar con una pastilla o con ejercicios, si estamos entrenados en técnicas para manejar la ansiedad.

Qué alivio, se ha pasado el ataque de pánico, pero el ataque de pánico es el estallido de una tensión insoportable para el cuerpo, que descarga y se va calmando, hasta estar otra vez tranquilo.

Se ha liberado de la tensión, pero no de lo que está causando esa tensión.

Lo que provoca el ataque de pánico son las preocupaciones, los miedos. Y eso no se ha ido, así que puede volver a tener un ataque de pánico.

Además, se ha añadido otro miedo nuevo: el miedo a tener otro ataque de pánico, algo que ha sido horroroso e insufrible.

Así que ahora tenemos:

  1. Los miedos y preocupaciones terroríficas que han provocado el primer ataque de pánico y
  2. El miedo a que se repita de nuevo un ataque de pánico

Fíjese bien, el ataque de pánico se ha provocado por los miedos y preocupaciones personales que nos agobian mucho. O sea, los ataques de pánico se producen por los miedos personales que nos aterran, nos dan miedo, mucho miedo, pánico.

Los ataques de pánico no se producen por  el mal funcionamiento de nuestro cuerpo, de hecho se producen porque nuestro organismo funciona bien, pero necesita descargar la tensión acumulada por estrés o por ansiedad.

Los ataques de pánico y crisis de ansiedad intensas, se producen por nuestros miedos que provocan mucha tensión corporal, y el organismo necesita descargar cuando se acumula más de la que puede soportar para funcionar bien.

A excepción, de las crisis de ansiedad y ataques de pánico producidos por situaciones muy estresantes como puede ser un accidente de tráfico, y otros sucesos traumáticos, que de golpe producen un impacto emocional muy intenso.

Resumiendo

Las crisis nerviosas y los ataques de pánico se desencadenan por la tensión excesiva acumulada en el cuerpo, y el organismo al final estalla con reacciones fisiológicas muy desagradables, y se va liberando la tensión.

Una vez se libera la tensión del cuerpo, termina el ataque de pánico. Pero no se liberan las preocupaciones, que son las que producen la tensión mental y termina produciendo tensión corporal.

Así que si queremos dejar de tener ataques de pánico, vamos a liberarnos de las preocupaciones o por lo menos a disminuir la intensidad y miedo que nos producen.

Recuerde

Aunque el cuerpo funcione bien, podemos tener ataques de pánico para liberar la tensión emocional acumulada por los miedos y las preocupaciones que tenemos y no afrontamos. El cerebro recibe la señal de alarma: ¡estoy en peligro! Y reacciona activando recursos para enfrentar el peligro, como puede ser una buena descarga de adrenalina, que no utilizamos, más oxígeno para aumentar la energía, hiperventilamos, que no utilizamos ese oxígeno para correr o saltar, escapar de algo, ¡no! Y allí se queda asfixiándonos, llenando los pulmones que ya están llenos. Con estos recursos que nos proporciona el cerebro, no podemos huir o enfrentarnos al peligro que nos agobia, porque el peligro está en nuestra mente.

Para afrontar ese peligro, es necesario reconocer nuestros miedos y preocupaciones personales y ver como los solucionamos.

Los ataques de pánico indican que el cuerpo está bien, que lo que no funciona bien es nuestra forma de enfrentar las preocupaciones y miedos que tenemos.

Qué hacer

  1. Para controlar los ataques de pánico, están las técnicas para manejar la ansiedad o la pastilla
  2. Para eliminar los ataques de pánico o crisis de ansiedad, están los ejercicios mentales, ser conscientes de las preocupaciones y miedos personales intensos y aplicar las técnicas que facilitan enfrentarnos a nuestros problemas que tanto miedo provocan, y ver cómo vamos a solucionarlo.

Ejercicios mentales para localizar y combatir el pánico

Si ya ha tenido un ataque o más de pánico, los ejercicios son:

  1. Ejercicios para quitar el miedo a que se repitan
  2. Ejercicios para enfrentar preocupaciones y miedos

Si quiere evitar tener ataques de pánico y crisis de ansiedad:

  1. Ejercicios para enfrentar preocupaciones y miedos

En otros artículos, se proponen los ejercicios concretos.